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8.3 – BLOQUES y REFERENCIAS EXT. (C)

Atributos en bloques

Dentro de los bloques se puede incluir cualquier tipo de objeto o entidad que se contempla en el programa ya que como hemos visto anteriormente, cualquier dibujo realizado con “AutoCAD” puede ser insertado como un “bloque”. No obstante además de las entidades habituales, hay un tipo de objeto de texto que está específicamente concebido para ser usado en combinación con los bloques, y que son los “atributos”.

El objeto “atributo” no es más que un rótulo de texto, que al estar configurado dentro del bloque, se puede actualizar cada vez que se inserta este, adoptando un contenido particular y diferente en cada caso. Esto es una cierta forma, de integrar o coordinar ciertos contenidos de algunos archivos de dibujo, con bases de datos externas.

Para poner un ejemplo que pueda dejar claro el concepto, podemos pensar en el dibujo de toda una planta de oficinas, en la cual se incluyen las mesas o puestos de trabajo, y en cada mesa pequeños “bloques” que representan el repertorio de ordenadores distribuidos por toda la oficina. En el bloque “ordenador” podemos incluir uno o varios “atributos” que identifican, mediante un rótulo de texto, el modelo concreto del ordenador que tenemos en cada mesa de trabajo, su capacidad de disco duro, o cualquier otra propiedad que sea oportuna.

Una vez que tenemos almacenado en el atributo de cada bloque, los diferentes ordenados que hay en esa oficina, siempre podemos trasladar el contenido de toda la oficina a una relación o lista, que podemos llevar a una “hoja de cálculo” o “base de datos” ajena al propio “AutoCAD”.

Lo mismo que hemos usado los atributos para identificar los ordenadores de las mesas podríamos haber identificado las “personas” que trabajan en cada mesa, las “características de las mesas”, las de las “ventanas” de todo un edificio, o las “llaves de paso” que hemos situado en una instalación de fontanería. Obviamente la utilización de este sistema en cada caso depende de las necesidades particulares y la imaginación de cada usuario.

A modo de ejemplo, en la ilustración adjunta se puede ver una planta de distribución, en la que los rótulos que contienen el “nombre” y la “superficie” de cada habitación, son bloques insertados automáticamente con una rutina desarrollada en AutoLISP que consulta directamente el valor de la superficie desde la orden “área”, y solicita el nombre de la habitación en la línea de órdenes. Posteriormente con otra rutina automática se construye un cuadro donde se relacionan todas las habitaciones de la vivienda y se calcula y anota la suma de superficie “total” del conjunto.

La forma practica para el uso de los atributos, es en primer lugar la “definición” de cada atributo por separado, que se hace con la orden oportuna y como objeto es similar a un “rótulo” de texto. Posteriormente se define el “bloque” incluyendo el “atributo” como otro más de los objetos que lo componen, y a partir de aquí cada vez que se “inserta” ese bloque, el sistema desde la línea de órdenes o con un cuadro de diálogo, solicita los datos particulares del atributo, además de los propios para la inserción el bloque. Además de la orden para definir nuevos atributos, tenemos otras para la edición o modificación de los datos particulares que contiene cada bloque y también para la extracción sistemática a un archivo auxiliar de texto plano o formato SDF, que luego se inserta con facilidad en cualquier hoja de cálculo o base de datos.

El sistema de atributos corresponde a una configuración inicial desarrollada desde las primeras versiones del programa y en todo caso es completamente independiente de las conexiones con “Bases de Datos” mediante “ODBC” que se comentan en el último capítulo y que pueden resultar mucho más potentes aunque también tengan sus propias servidumbres o inconvenientes. También se debe tener en cuenta, que la utilidad de los atributos puede ser completamente independiente de su “extracción” a un soporte externo, como en el caso de los cuadros de superficies que se acaba de comentar.

La orden “ATRDEF(_ATTDEF)” se encuentra conjuntamente con la opciones de bloques en el menú dibujo. Sirve para definir los atributos mediante un cuadro de diálogo que se encuentra perfectamente explicado en la “ayuda” del programa. En el cuadro se incluyen los datos correspondientes, como la “etiqueta” que identifica el objeto, el mensaje que se lanza al insertar el bloque, el valor por defecto, el estilo del texto asociado, la altura y ángulo de este etc.

La orden “ATREDIT(_ATTEDIT)” Sirve para modificar o editar sobre el propio dibujo, los datos que contienen los atributos definidos en una inserción de bloque determinada, a través del cuadro de diálogo.

La orden “ATREXT(_ATTEXT)” En este caso funciona desde la línea de órdenes y despliega un cuadro de diálogo donde se puede optar entre tres formatos diferentes, delimitado por “,” (CDF) delimitado por espacios (SDF) o bien en formato DXF. Opcionalmente se asigna nombre al archivo de texto plano, y un boton para designar un conjunto de selección que contenga los atributos o bloque cuyos datos se van a pasar al archivo de texto

Imágenes Raster Inserción y escala

En una de las primeras sesiones se comentaba la contraposición o diferencia entre los archivos de tipo “raster” y “vectoriales”, siendo los propios del AutoCAD o (*.dwg) uno de los ejemplos más característicos del tipo “vectorial”. Los archivos de formato “raster” se reconocían como adecuados para trabajar con “imágenes” de tipo fotográfico, en las que puede haber una gran variedad de color, pero con una configuración y aspecto relativamente “fijos”, que se organiza como una rejilla de puntos ordenados en filas y columnas, en los que se guardan los valores de color o luminosidad, sobre un área o tamaño prefijado de antemano.

La difusión de archivos de tipo “raster” en los últimos tiempos ha sido realmente espectacular, debido sobre todo a la gran difusión de Internet por un lado y al desarrollo de la fotografía digital, que ya hace algunos años ha terminado por arrinconar y dejar totalmente obsoleta la fotografía tradicional en soporte de película.

Los formatos de tipo “raster” son muy diversos y aunque una de sus grandes utilidades sea la “fotografía” tampoco se puede olvidar la gran generalización en el uso del “scaner”, que permiten captura una  imagen digital, de cualquier documento disponible en papel, a modo de “fotocopia” con total independencia de que contenga “texto”, “fotografías” u otros dibujos previos en ese soporte.

Aunque los archivos de tipo “raster” no son objetos propios de un sistema de CAD, el programa permite la posibilidad de “insertar” imágenes de la mayoría de formatos de este tipo, como si fueran pequeñas “fotocopias” o áreas rectangulares que se insertan en nuestro archivo de dibujo permitiendo una vista rigurosa de la imagen que contiene, aunque los elementos interiores que configuran la imagen no sean modificables.

El archivo de tipo raster se inserta como si se tratara de una referencia externa, y de hecho la orden correspondiente se encuentra disponible en la misma paleta de las “RefX”. Cuando se inserta en nuestro dibujo, además de un punto de inserción que se emplea para situar la esquina inferior izquierda, se especifica un tamaño relativo que sirve para establecer la proporción entre los puntos de la imagen o “píxeles” y las unidades de dibujo.

Una vez insertada la imagen, esta queda definida por su contorno y es manipulable a través de él, es decir se puede desplazar, girar, o escalar, actuando sobre su contorno exactamente igual que si se tratara de un objeto “rectángulo”.

Control de imágenes (clipping y fadding)

Conviene llamar la atención sobre una forma de utilizar este tipo de imágenes, ya que si tenemos la de algún plano o mapa de cartografía y conocemos la posición y distancia relativas de al menos dos puntos interiores, siempre podremos definir una combinación de desplazamiento, giro y escalado, de forma que la imagen “raster” quede perfectamente ajustada con el sistema de coordenadas y unidades de nuestro dibujo y a partir de ahí se puede utilizar como referencia de la geometría de nuestro dibujo. Esta operación se puede realizar toda ella en un solo paso con la orden “ALINEAR(_ALIGN)”.

Además de alinear las imágenes raster para ajustarlas al sistema de unidades de nuestro dibujo, podemos controlar algunos parámetros de la misma, con la orden “AJUSTARIMG(_IMAGEADJUST)” que despliega un cuadro de dialogo sobre el que se puede modificar el “contraste” el “brillo” e incluso la “opacidad” de la imagen, también conocida como “fadding”, lo que nos permite un cierto control de conjunto, sobre el aspecto general de una imagen “raster”.

Además de esto es posible redefinir el “contorno” con la orden “_IMAGECLIP” la cual permite redefinir un nuevo rectángulo, lógicamente menor que el inicial, o incluso un área poligonal, que restringe la imagen a su interior. También es posible mediante una variable de estado “IMAGEFRAME” hacer desaparecer de la vista, la línea de contorno que delimita la imagen aunque en este caso hay que advertir, que si no se muestra el contorno ya no es posible la designación de la imagen como objeto, para hacer alguna otra modificación sobre ella.

 

8.2 – BLOQUES y REFERENCIAS EXT. (B)

Cuando hayamos organizado un conjunto de bloques en el ordenador para facilitar el trabajo cotidiano, antes o después surgirá la conveniencia o necesidad de realizar alguna modificación en uno o varios de los bloques que utilizamos normalmente.

Si el bloque es un archivo independiente en el disco, la modificación solo requiere abrirlo, hacer las modificaciones oportunas y volver a guardarlo. A partir de ese momento, cuando queramos “insertar” el bloque en un nuevo dibujo, estará convenientemente actualizado.

No obstante cuando abramos un archivo de dibujo anterior, que ya tenía insertado ese bloque, observamos que corresponde a la versión antigua que es la que se había insertado en su momento. Esto es así por la propia concepción del sistema de bloques y el funcionamiento interno que se ha descrito en la sesión anterior.

Si queremos actualizar la nueva versión del bloque resulta bastante fácil hacerlo, ya que en el cuadro de dialogo de la orden “insertar” podemos pulsar el botón de navegación para localizar en el disco la nueva versión y lo insertamos como si no estuviese incluido en la lista interna de bloques. Entonces el sistema lanzará un mensaje de advertencia diciendo que ya existe un bloque con ese mismo nombre, y nos dará la opción de actualizarlo pulsando una confirmación.

A partir de ese momento todas las inserciones internas del bloque se actualizan con la nueva versión, y aún podríamos tener la alternativa de guardar el archivo con una variante del nombre inicial si queremos conservar una versión diferente de este archivo, con la versión antigua del bloque, o bien lo actualizamos todo.

Evidentemente para actualizar completamente los “bloques” antiguos que tengamos insertados en todos nuestros archivos de trabajo, se requeriría ir abriendo sistemáticamente los archivos uno a uno para ir realizando la operación anterior. En todo caso esa posibilidad es bastante rebuscada y sin sentido, ya que lo normal es mantener los dibujos antiguos tal como se han utilizado en cada momento. No obstante ese supuesto sirve para ilustrar de forma bastante práctica, la diferencia de comportamiento de las “Referencias Externas” con respecto a los bloques.

Referencias externas (Anidar y Superponer)

La “Referencia Externa” (RefX) es un mecanismo que sirve para enlazar dentro de un determinado archivo de dibujo, cualquier otro que se encuentra en el disco del ordenador, o en cualquier lugar de la red local, de tal forma que ambos archivos mantienen su independencia.

 Esto quiere decir que las actualizaciones o modificaciones que se realizan en el archivo “externo”, se reflejan siempre en el archivo de trabajo que contiene el enlace, con la única salvedad de la coordinación de actualizaciones. Si el archivo de trabajo se encuentra abierto, en cuanto el sistema detecta una modificación en el archivo enlazado, presenta un mensaje de advertencia con la opción de actualizarla, y en los demás casos, se lee del disco el archivo en su versión actual cada vez que se abra el que contiene la referencia.

La operación con “referencias externas” es muy similar a la “inserción” de cualquier bloque, ya que de hecho, en un primer momento el resultado aparente va a ser el mismo.

En el caso de insertar un dibujo como “bloque”, todos los datos del archivo externo se copian e incorporan dentro del archivo de trabajo en el estado en que se encuentren en ese momento, por tanto las modificaciones que se hagan con posterioridad en el archivo externo ya no se reflejarán dentro de este. En cambio cuando se “enlaza” el archivo de dibujo como una “Referencia Externa”, cada vez que se abra el archivo de trabajo se “lee” la versión del archivo enlazado que hay en cada ocasión.

Esta idea se complica algo cuando consideramos otras “referencias” que puedan estar dentro  del archivo que a su vez enlazamos, ya que en primer lugar se pueden generar “referencias circulares”, es decir que el archivo que queremos enlazar contenga él mismo o bien a través de alguna de sus propias referencias, al archivo sobre el que estamos trabajando. En este caso el programa lanza un mensaje de advertencia y bloquea el error.

Por otra parte hay que considerar dos modos  de enlazar las referencias externas, que son los de “anidar” y “superponer”. La diferencia entre ambas es que cuando una referencia está “anidada”, cualquier otro archivo en el que lo enlacemos, se va a llevar anidadas también, todas las referencias que contenga el archivo que se enlaza, siguiendo un modelo similar a las ramas de un árbol.

Cuando la referencia está configurada como “superpuesta” al enlazar el archivo que la contiene dentro de otro superior, esa referencia ya no es arrastrada como en el caso anterior, y simplemente se ignora en el archivo más externo. Esta configuración permite controlar y coordinar más fácilmente el trabajo en “red”, ya que cuando hay diferentes usuarios modificando distintos archivos, podríamos tener un archivo “raíz” en el que concurran archivos comunes “enlazados” por diferentes ramas o caminos, generando conflictos en las actualizaciones  del archivo raíz.

El sistema de “capas” de cualquier “referencia externa” se integra en nuestro archivo de dibujo, mediante un nombre combinado con el del propio archivo, de forma que las capas nunca se solapan ni mezclan con las del dibujo actual. El programa genera automáticamente un nuevo filtro por cada referencia externa, que facilita mucho la gestión de las capas. Los cambios que hacemos hacer sobre esas capas en nuestro dibujo, (visibilidad, color, grosores, etc.) nunca afectan al archivo origen de la referencia, no obstante hay que tener en cuenta una variable de configuración, que puede controlar si esos cambios en las capas derivadas se mantienen cuando guardamos el archivo, o bien se pierden cada vez que se refresca la referencia, con los valores que tengan configurados sobre el archivo de origen..

La orden “ REFEXTERNAS(_XREF)” Se encuentra disponible en el menú de “insertar” con dos posibles accesos, la primera “DWG refrence”, que simplemente abre el cuadro de navegación de archivo, para seleccionar a través del sistema de carpetas, el archivo correspondiente, o bién con la opción “Referencias externas” que abre un paleta específica donde se identifican todas las referencias externas y/o archivos de otros tipos (Raster/DWF/DGN/PDF) que también pueden estar enlazados.

La paleta dispone de un menú el la parte superior con algunos botones para actualizar referencias o cargar nuevos archivo, y a continuación un panel donde se presentan todas la referencias externas y archivos enlazados en forma de lista o de árbol, y que permite gestionar la actualización, la eliminación definitiva o bien una eliminación temporal, que suprime el archivo de la pantalla gráfica pero conserva todos los datos de localización y en su caso las modificaciones locales de las capas si están configuradas así.

En la parte inferior se completa otro panel de información donde vemos el nombre del archivo, la referencia, la trayectoria o “path” donde se encuentra el archivo, el tipo de enlace (anidado/superpuesto) y también la que se almacena, que puede ser absoluta o relativa. Normalmente estos campos son interactivos y se puede insertar el cursor y modificar oportunamente.

Cuando se selecciona el archivo para incorporar como “RefX” por primera vez se despliega un cuadro de diálogo similar al que servía para insertar bloques, aunque en este caso además de las coordenadas del punto de inserción el factor de escala y el ángulo de giro, aparecen las opciones de “anidar” o “superponer” y la selección de trayectoria “Path” relativa o absoluta.

 

8.1 – BLOQUES y REFERENCIAS EXT. (A)

Bloques (concepto y uso)

Los  bloques constituyen otro de los elementos característicos del dibujo con ordenador. La idea del “bloque” es la de un pequeño dibujo más o menos elaborado que se maneja como si fuera un objeto único, aunque de hecho contenga a su vez una estructura más compleja.

Al igual que en el caso de las “capas”, en el dibujo manual de tipo tradicional, no existía prácticamente ninguna técnica asimilable al uso de bloques, con la única salvedad de algunas “hojas de transferencia” que contenían ciertos tipos de “símbolos” o “letras” que se transferían al papel con relativa facilidad.

Aunque el “bloque”, en principio podría ser asimilable a aquellos símbolos, el uso del “bloque” en un ordenador es mucho más flexible, versátil y potente, ya que resulta bastante fácil crear o modificar su definición y características, para adaptarlo a las necesidades de nuestro trabajo particular.

En el caso del AutoCAD, las características de los bloques se han ampliado en las últimas versiones con la incorporación de “bloques dinámicos”, pero en este tema vamos a comentar exclusivamente las características de los bloques estáticos o tradicionales. Cualquier interesado puede seguir las peculiaridades de los “bloques dinámicos” en la “ayuda” del programa.

La idea del bloque, como se acaba de decir, es la de un dibujo relativamente pequeño o sencillo, guardado con un “nombre” o etiqueta, para poder ser insertado en un dibujo más complejo tantas veces como sea necesario. La verdad es que el bloque no tiene por qué ser “pequeño” ni “sencillo”, ya que no hay restricciones en este sentido, pero para que tenga utilidad como tal, “debe repetirse” varias veces dentro de otros dibujos.

Realmente lo que da más sentido a la utilización de los bloques, es la idea de que son objetos, o “pequeños elementos” del dibujo general que se repiten en distintas posiciones dentro de una configuración más amplia. Si nos fijamos, en un dibujo de arquitectura, los muebles, aparatos sanitarios, puertas o ventanas, son ejemplos de elementos que incluso con algún repertorio limitado de variantes, se repiten muchas veces en un mismo dibujo, y por supuesto también en otros dibujos similares. En ingeniería civil, podemos considerar los pozos de registro, válvulas, sumideros o señales de tráfico, y naturalmente en cualquier sector que nos fijemos podremos encontrar paralelismos ya que la idea principal del “bloque”, es la de un “componente” que se repite en “muchas” ocasiones.

De hecho el funcionamiento interno de los “bloques” en AutoCAD se realiza estableciendo una sección independiente del resto del archivo de dibujo, en la que se identifica primero el “nombre” o etiqueta del bloque, su “punto de inserción”, y a continuación todos los elementos gráficos que lo componen, descritos como si se tratara de cualquier otro archivo de dibujo independiente, incluidas capas, colores y tipos de línea. Obviamente esa descripción de componentes se anota “una sola vez” en el archivo general, y cada vez que “insertamos” un bloque, lo único que se anota en la nueva posición, es el nombre del bloque, el punto de inserción y el tamaño relativo.

Este mecanismo establece las características principales para el manejo de los bloques, ya que, no solo podemos definir como un bloque cualquier parte seleccionada dentro de nuestro dibujo actual, sino que cualquier bloque puede contener a su vez otros bloques anidados y también, cualquier archivo de dibujo independiente que se encuentre en el disco, o accesible por la red local, puede ser “insertado” en nuestro dibujo como si fuera un “bloque” mas.

Una vez que se “inserta” a modo de bloque cualquier archivo de dibujo externo, queda incorporado en la lista de “bloques” de nuestro dibujo, y está disponible para poder ser insertado sucesivamente en otros puntos del dibujo. Por otra parte, cualquier “bloque” interno de nuestro archivo de dibujo, se puede “guardar” en el disco como si fuera un archivo de dibujo independiente, y posteriormente podrá ser abierto o editado, como cualquier otro.

Esta característica da lugar a la posibilidad de adoptar distintas estrategias a la hora de organizar nuestra librería de bloques, ya que por un lado podemos crear una estructura de carpetas donde se alojan los bloques constituidos por archivos independientes, o bien por otra parte podemos configurar un pequeño repertorio de archivos de tipo “contenedor”, alojando en cada uno un conjunto parcial de bloques de uso similar. Para gestionar un conjunto relativamente amplio de bloques es conveniente complementarlo con algún desarrollo personal de menús, o bien configurar alguna “paletas de herramientas” que están muy bien adaptadas para este fin, como puede comprobarse a través de la “ayuda”.

La orden “BLOQUE(_BLOCK)” sirve para definir nuevos bloques dentro del archivo en el que estamos trabajando. Se encuentra disponible en el menú de persiana “draw/block/make” o en el panel de la cinta de opciones y cuando se ejecuta despliega un cuadro de diálogo específico.

El cuadro dispone de una casilla para anotar el nuevo nombre, con una lista desplegable que permite ver la lista completa de todos los bloques internos que tenemos hasta ese momento en el dibujo actual. Debajo de la lista tenemos un botón que permite señalar sobre la pantalla gráfica el “punto de inserción” para el nuevo bloque, o bien unas casillas para anotar las coordenadas directamente.

A la derecha se encuentra otro bloque con un par de pulsadores que permiten hacer la selección de los objetos y entidades que van a configurar el nuevo bloque. También se encuentran algunas opciones más, de comportamiento, unidades etc. que se encuentran explicadas en la ayuda correspondiente.

Cuando hemos completado la definición, se sale del cuadro pulsando el botón “OK” y a partir de ese momento el nuevo bloque se encuentra disponible bajo el nombre de referencia para sucesiva “inserciones” dentro de nuestro archivo de dibujo.

La orden “INSERTA(_INSERT)” es la que sirve para insertar bloques en nuestro dibujo. Se encuentra en el menú de persiana “insert/block” o bien en el panel de la cinta. Su ejecución despliega un cuadro de diálogo similar al caso anterior donde podemos seleccionar el nombre desde una lista desplegable, pero en este caso tenemos también un botón a su derecha que nos permite acceso a la navegación por el disco, y naturalmente “seleccionar” cualquier archivo de dibujo independiente, que a partir de ese momento queda incorporado, como un bloque más, en la lista interna de nuestro dibujo.

En este caso sobre las zonas inferiores, se puede anotar las coordenadas del punto de inserción, o bien una marca para situarlo gráficamente en pantalla cuando salgamos del cuadro de diálogo. Hay otra casilla para definir un “factor de escala” que puede ser uniforme en los tres ejes, o diferenciado, y también puede quedar pendiente de definición gráfica. Finalmente otro tanto para el ángulo de giro con el que se quiere insertar el bloque.

En la parte inferior existe una casilla que podemos marcar “explode”, la que supone que el bloque,  a continuación de ser insertado se descompone, y todos sus elementos se incorporan en el archivo de dibujo como elementos individuales que peden ser editados separadamente, cosa que no sucede en los bloques habituales.

Una variante de la orden es la sintaxis “-INSERT”, que en este caso opera solo en la línea de órdenes, sin desplegar el cuadro de diálogo. Con esta variante de la orden, se invoca el último “nombre” de bloque que hayamos insertado, y su confirmación inicia la rutina de designación gráfica en pantalla, lo que es una forma bastante cómoda de realizar sucesivas “inserciones” de un mismo bloque.

La orden BLOQUEDISC(_WBLOCK)” Es una orden que sirve para guardar un bloque ya definido en el dibujo actual, como un archivo independiente. Cuando se ejecuta despliega un cuadro de diálogo específico que permite localizar una carpeta en el disco o la red, asignar un nombre, y elegir cualquier bloque interno de una lista desplegable. Opcionalmente permite seleccionar un conjunto de objetos para configurar un nuevo bloque o bien guardar el dibujo entero.

En la opción “export” del menú file, también es posible seleccionar una opción “bloque” de forma que lo que guardamos en el disco es una definición de bloque que contiene el archivo actual.

Capa color y tipo de línea en los bloques.

Como ya se ha comentado anteriormente, dentro de cualquier bloque puede haber un sistema de “capas”, “colores” y “tipos de línea”, exactamente igual que en cualquier otro archivo de dibujo, no obstante en el caso de los bloques la capa “0” juega un papel bastante singular, ya que al definir un nuevo bloque, todas las capas que contienen objetos, quedan incorporadas al mismo, y los objetos quedan empotrados en ellas, sin la posibilidad de ser cambiados de capa porque forman parte de un conjunto mayor que es el “bloque.

No obstante aquellos objetos que están en la capa “0” cuando se crea el bloque, cada vez que se “inserte” este, se situarán sobre la “capa actual” en ese momento, que por otra parte es la de referencia respecto a la “inserción” del bloque, el cual podremos cambiar de capa, aunque los únicos elementos internos que cambien, son los que inicialmente estaban en la capa “0”

Dicho en otras palabras la capa “0” funciona como capa “flotante” o indirecta en la definición de bloques, exactamente lo mismo que sucede respecto al color o el tipo de línea con la opción “PorBloque”.

Si queremos que un bloque complejo tenga un comportamiento similar a las entidades simples en cuanto a los cambios de color, capa y tipo de línea, debemos tener el cuidado de situar en la capa “0”, todos los elementos que lo van a configurar, y también asignarles a todos ellos, el color y el tipo de línea “PorBloque”.